El 6 de enero de 2023, el Reino de Ribaseca aprobó el Decreto Real XXVII de apoyo a Ucrania y por la destrucción de Rusia, con el que abría una línea diplomática de apoyo inquebrantable a las posiciones más beligerantes de los miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) como Estonia, Letonia, Lituania y Polonia, partidarios de que la organización vaya a la guerra total contra Rusia.
Mediante el decreto, Ribaseca se sumaba a las propuestas de varias organizaciones que sostienen la necesidad de desmembrar Rusia para acabar con lo que consideran «el último gran imperio opresor».
Mediante el Decreto Real XXI aprobado el 25 de enero, Ribaseca profundiza en su línea diplomática beligerante, tras haberse confirmado que las grandes potencias europeas entregarán los tanques Leopard alemanes a Ucrania. En esta ocasión, Ribaseca insiste en la necesidad de entregar a Ucrania aviación moderna para seguir luchando contra Rusia, según el propio decreto expresa, «aplastar a Rusia».